"¡Plata y monedas!" reclama imperativa mi pimpollo colorado a las 7 a.m.
"¡Plata!¡Monedas!" solicita mi flaco, asombrándonos con su madrugues 2 minutos después.
"¡Mamucha, papucho ¿no piensan levantarse hoy?!" interroga mi florcita brunette a las 7:10.
"¡Meau, meau!" exige atención la lastimera Luna, infructuosamente.
"Llamá a mi trabajo y avisá que estoy enfermo" mascullo debajo de las cobijas a las 7:15.
"Poné la piernita así..." susurra la mostra en mi oído.
plap, plap hace la cola de Elvis en el piso, única señal que lo distingue de un felpudo.
Una mañana típica.
ResponderBorrarQue te mejores!
ResponderBorrarTas bien?
Super bien. Lo de la enfermedad fue solo una excusa... :))
ResponderBorrar...Y bueh... sobreviviste al desfalco, yo también venía por Plata y monedas!
ResponderBorrarBuen finde Mostro ;)
Lo siento, Carlos, fuiste! :)
ResponderBorrarQué lindo relato monstruítico-familiar!!!
ResponderBorrarBuen fin de semana a todos.
Gracias Mariana, igualmente.
ResponderBorrarpapu, te falto cuando dije
ResponderBorrar"Alguien me regala una ficha de subte?" :)
Tenés razón!
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