Desde Mosterio, capital de la Esfera Cultural Goliciana, queremos compartir con ustedes pitutos, sereneiders, vainas arrechas y ñuflos. Trataremos de dilucidar (con ayuda de los espíritus de Perón, José de Zer y Freud) porque al Capitán Kirk se le rompían tanto las camisetas.
Cuestión de piel
Volví a escribir alguna cosa acá. Sean misericordes.
Todo un privilegio ser la primera en abrir los comentarios y mira tú... ¡no sé que decir!
ResponderBorrarDebe ser eso que llaman "miedo escénico".
:(
Mostro, le tengo una buena noticia:
ResponderBorrarha tenido una mención honorífica en mi blog.
En realidad se trata de un jueguillo, pase por mi blog y vea...
Saludos!
no se porque me encanta esa idea de tenerlo de regreso!! me da una vibra especialsu letra.
ResponderBorrarandare por aqui :-) linda semana y besos.
fantasía, no digas nada, lo que importa es tu presencia. Un beso enorme.
ResponderBorrarPergio, ¿gracias? :)
Viriz, ¿a cuantos bloggeros le dirás lo mismo?