Desde Mosterio, capital de la Esfera Cultural Goliciana, queremos compartir con ustedes pitutos, sereneiders, vainas arrechas y ñuflos. Trataremos de dilucidar (con ayuda de los espíritus de Perón, José de Zer y Freud) porque al Capitán Kirk se le rompían tanto las camisetas.
Chica dura
Ella me espera. Me exije. Me exije más y más. Me amenaza. Yo soy tan débil. Y digo si, si, mejor decir que si.
6 comentarios:
mmmmmmmmmmm, mejor no opino jajajaja pero cierto celo me invade ;) besos
Pero que hombre debilucho... no podés decir que no????
Saluditos!
Si usted dice que no, me pasa el telefono, yo digo que si.
Un abrazo
Ale
No seas celosa, Amada Inmortal...
No me gusta contradecir a la gente armada, Evan...
alejandro, esperá sentado.
A veces por más que quieres no puedes decir que no... Y hay veces en que sería un pecado decir que no...
y como pecar no queremos...
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